Creemos firmemente en el Aprendizaje Activo e Integral

Aprender es una decisión personal, pero diseñar los procesos de enseñanza constituye una competencia y habilidad primordial para quienes estamos comprometidos con el traslado de competencias.

Hay personas que enseñan por vocación de forma empírica y hay personas que por necesidad y subsistencia se dedican a la formación, por nuestra parte creemos que FORMAR y más que todo desarrollar Formación Profesional para personas adultas, nada tiene que ver con modelos evidentemente académicos, hay que transferir competencias a través de experiencias de aprendizaje novedosas, creemos que es mejor formar que capacitar (un termino muy mal utilizado) y que solo generando contenidos interesantes, cautivadores y adictivos se puede mejorar las habilidades y actitudes de las personas, con estas dos cosas cualquier conocimiento podrá ser recordado.

Los procesos de formación profesional deben ser amenos y vitalizantes, no aburridos ni autoritarios o con juegos o dinámicas sin sentido ni congruencia, debe siempre buscarse siempre las mejores referencias, contenidos, ejercicios y combinar para fomentar el agrado visual en todo el entorno y materiales de aprendizaje.

Diseños aburridos y tediosos ante los sentidos invitan a la deserción de cursos y a la desidia de diferentes modelos de enseñanza, durante la pandemia tuvimos suficientes ejemplos de formaciones desarrolladas a la carrera y sin tino, pero es momento dar alto a esas prácticas incomodas y ejecutadas sin visión ni precisión.

Solo logrando experiencias gratas de aprendizaje las personas podrán enfocar sus habilidades, actitudes y competencias a la resolución de problemas en sus espacios profesionales de interacción.

Acompañenos a Aprender a Enseñar…